· Le advierten muy seriamente que “en México NO HAY FIFÍS, ni hay personas tratadas como mascotas”; hay un común denominador que se llama: Mexicanos
· No queremos la llegada de células de organizaciones delictivas; no queremos terrorismo de países vecinos tocando a nuestras puertas. Queremos vivir en paz
· Al final, la historia nos cobrará muy cara la mediocridad de su gobierno y de los ciudadanos que callaron, aun sabiéndose humillados.
BLAS A. BUENDÍA
Reportero Free Lance
filtrodedatospoliticos@gmail.
Con el rubro de #CartaAlPresidente, #MéxicoDeLosMexicanos y #MéxicoParaLosMexicanos, un ciudadano consciente preparó una carta abierta para el Jefe del Ejecutivo federal, y la virilizó en las benditas redes sociales donde demanda a López Obrador que “¡deje de dividir al país””.
Lic. Andrés Manuel López Obrador
Presidente de la República Mexicana
Soy un ciudadano mexicano por nacimiento, pensante y con todos los derechos y obligaciones que la Constitución me otorga. Soy un ciudadano mexicano que desea ver un país mejor, no el país que día a día se va deteriorando más.
A usted se le confirió una gran responsabilidad, una gran encomienda llamada México. No le dimos la oportunidad de tener un negocio propio ni familiar, ni de amigos. Esto es un país y, aunque muchos no lo elegimos, el haber llegado a la presidencia, significa que usted firmó un contrato y trabaja para los más de 100 millones de mexicanos; es decir, usted trabaja para todos.
El empleado es usted y los ciudadanos somos sus patrones y nosotros decidimos la forma de gobierno que queremos. Por eso le exigimos: ¡pare de introducir las doctrinas del Foro de Sao Paulo! Pare sus conferencias mañaneras, que nos cuestan mucho dinero y no son productivas. Cambie su gabinete y busque a los mejores hombres y mujeres de México y no oportunistas, arrastrados e ignorantes, que no saben administrar nuestros bienes y riquezas.
Deje las ocurrencias para sus reuniones familiares, no para dirigir al país, MÉXICO LO CONTRATÓ PARA HACER LAS COSAS BIEN, ¡¡pues hágalas!! Somos sus patrones y así se lo pedimos (artículo 39 de nuestra Carta Magna).
Así mismo, hoy le exijo que se conduzca con respeto hacia cada ciudadano. Deje de dividir al país. Deje de sembrar el odio y la ignorancia en este pueblo que, si bien necesita educación, no merece que se fomente la división entre nosotros.
Este México requiere que usted y todos en su gobierno se conduzcan con honestidad, transparencia y ética; que se conforme con los mejores hombres y mujeres que este país demanda; es decir, que se elimine la improvisación y se trabaje eficientemente para todo Mexicano.
En México NO HAY FIFÍS, ni hay personas tratadas como mascotas. Ésos, a quienes usted llama fifís, ni son fantoches, ni conservadores, ni sabelotodo, ni hipócritas, mucho menos de doble cara. Sólo hay un calificativo: somos MEXICANOS y somos mandantes.
Queremos oportunidades para todos, no limosnas; queremos que la educación y la cultura fluyan; que la salud sea alcanzable para todos y se bajen los riesgos de las discapacidades; que se arraigue el patriotismo en nuestra sangre, que se respeten nuestros recursos naturales, que se respete a los pueblos originarios y sus costumbres, así como la tierra que por siglos los ha cobijado.
Este país no es de usted. Es nuestro, es diverso, pero nuestro. No necesitamos ocupación extranjera, no queremos invasiones disfrazadas de ayuda humanitaria, no queremos que siga entrando al País gente extraña, con enfermedades como lepra, sarampión y otras. No queremos la llegada de células de organizaciones delictivas; no queremos terrorismo de países vecinos tocando a nuestras puertas. Queremos vivir en paz.
Lo hacemos a usted responsable de todo lo que suceda en este país. Le pedimos que corrija el rumbo equivocado por el que nos está llevando ya que, de lo contrario, la violencia crecerá, la pobreza aumentará y un PERDÓN no será suficiente. Al final, la historia nos cobrará muy cara la mediocridad de su gobierno y de los ciudadanos que callaron, aun sabiéndose humillados.
Porque México es de los mexicanos para los mexicanos. ¡Trabaje para los mexicanos! ¡Pero ya!, puntualiza el ciudadano consciente.