“Y abrí la boca para que se fuera (mi alma).
Y se fue. Sentí cuando cayó en mis manos el hilito de sangre
con que estaba amarrada a mi corazón”, (Pedro Páramo).
Luis Mena Pantoja
Con un larguísimo nombre de pila y sólo tres libros publicados, Juan Rulfo es uno de los escritores más importantes en la literatura mexicana, latinoamericana y universal. Dentro de su obra destacan el libro de cuentos El llano en llamas (1953), con 15 relatos, varios de los cuales ya habían sido editados antes en distintas revistas, y la novela Pedro Páramo (1955), ambos escritos con un estilo que mezcla realidad y fantasía, retrata ambientes rurales posteriores a la Revolución Mexicana, y muestra tradiciones cristianas e indígenas, a través de personajes que habitan en pueblos pobres, caracterizados por la falta de oportunidades, la soledad y la guerra.
Juan Nepomuceno Carlos Pérez Rulfo Vizcaíno nació en Apulco, Jalisco, el 16 de mayo de 1917, hijo de Juan Nepomuceno Pérez Rulfo y María Vizcaíno Arias. Tenía sólo siete años cuando su padre fue asesinado durante la Guerra Cristera; cuatro años más tarde, su madre también murió y fue a vivir con su abuela en San Gabriel.
En 1922 comenzó su educación básica en el Colegio de las Josefinas, hasta que en 1926 -también a causa de la Guerra Cristera-, cerró esta escuela. Un año después reanudó sus estudios en el orfanato del Colegio Luis Silva, en Guadalajara. En 1930 inició su participación en la revista México y tras fracasar en su intento de ingresar en 1933 a la Universidad de Guadalajara, viajó a la Ciudad de México para asistir como oyente al Colegio de San Ildefonso.
En 1934 comenzó sus primeros trabajos literarios y colaboraciones en la revista América, además de asistir a conferencias en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Autónoma Nacional. A partir de 1937 comenzó a trabajar como clasificador del Archivo de la Secretaría de Gobernación, instancia que un año después lo comisionó a viajar por varias regiones de México. En esta misma época comenzó a publicar sus cuentos en diversas revistas literarias.
Posteriormente, en 1941 trabajó como agente de migración en Guadalajara, donde estableció una relación amistosa con el escritor Juan José Arreola, y desde 1946 se dedicó también a la labor fotográfica. Entre 1952 y 1954, fue becario del Centro Mexicano de Escritores, y se dedicó a escribir su primera novela: Pedro Páramo, la cual ha sido considerada como una de las obras literarias más importantes de la historia por autores tan importantes como Jorge Luis Borges y Gabriel García Márquez. De 1954 a 1957 fue colaborador de la Comisión del Papaloapan y editor en el Instituto Nacional Indigenista de la Ciudad de México. Entre 1956 y 1958, escribió su segunda novela: El gallo de oro, que fue llevada al cine con una adaptación de García Márquez y Carlos Fuentes, y publicada hasta 1980. Juan Rulfo murió en la Ciudad de México el 7 de enero de 1986.
“Y es que allá el tempo es muy largo. Nadie lleva la cuenta de las horas ni a nadie le preocupan como van amontonándose los años. Los días comienzan y se acaban. Luego viene la noche. Solamente el día y la noche hasta el día de la muerte, que para ellos es una esperanza”. (Luvina).