El saber es el único espacio de libertad del ser…
Michel Foucault
Arturo Suárez Ramírez / @arturosuarez
Estimado lector, gracias. Iniciamos una semana más de pandemia y no dejamos de sorprendernos por las formas como la 4T, López Obrador y el doctor Hugo López-Gatell han manejado la emergencia sanitaria, contradicciones, contradicciones y contradicciones en los mensajes que mandan a la población y eso ha generado un clima de incertidumbre o de pensar que lo peor ya pasó y la realidad es otra.
Así los hemos escuchado que los protege una “estampita” guardada en la cartera del tabasqueño, que “el presidente es un científico”, dicho por uno de los ideólogos recalcitrantes en canal Once como es John Ackerman, que “su fuerza es moral y no de contagio” por López Gatell, que “eso se cura con un mole de guajolote” según Miguel Barbosa, las gotas de nanopartículas cítricas de Olga Sánchez Cordero, de verdad son perlas dignas para el realismo mágico.
En ese contexto la misma Organización Mundial de la Salud, pidió a los líderes latinoamericanos que emitan «mensajes coherentes» para luchar contra la pandemia por el COVID-19, pues Latinoamérica es actualmente la zona más afectada y la ciudadanía recibe consejos contradictorios de sus gobiernos. Esto es algo que se ha convertido en parte de la cotidianidad de la 4T, no comunican o no quieren comunicar de manera eficiente a sus gobernados.
Ahora el presidente López Obrador nos receta un decálogo, que seguramente dejó a más de uno con la boca abierta, nada de ciencia, nada hecho por especialistas que tenga un fin practico, que les sirva a los ciudadanos para enfrentar “la nueva normalidad”. Un documento más que se centra en sus buenos deseos, eso nadie se lo puede negar al hijo prodigo de Macuspana, pero tampoco se puede negar que con eso no se gobierna a un país.
Insisto, la realidad nos golpea todos los días una y otra vez, cuando en la conferencia de López-Gatell da las cifras escalofriantes, más de 17 mil fallecidos, un semáforo en naranja cuando los casos de contagio siguen aumentando, sin hacer pruebas, con los médicos cansados y decepcionados porque no se les ha cuidado de forma eficiente y ¿nos lanzan un decálogo “moralino” para curarnos de una pandemia? ¿Un sermón?
Mejor hubiera sido no lanzar nada, porque es una determinación errática que se suma a otras decisiones que van a quedar para la historia, ya que le gusta tanto a López.
Para los ciudadanos, ante tales dislates, no nos queda más que aplicar lo aprendido y sugerir que los demás lo apliquen, sana distancia, lavado de manos, gel, careta, cubrebocas y si no hay a que salir, mantenerse en casa, esto todavía no termina y se ve un gobierno irresponsable, veremos en las próximas semanas.
Entre Palabras
Ha trascendido que en Palacio Nacional se construyen nuevas instalaciones de seguridad para el presidente. ¿Sería muy bueno que nos dijera de que se trata?
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Hasta la próxima.
