Carlos Lara 

Estimado Señor Periodista: Antes que nada, le ofrezco una disculpa por este abandono de meses. Han sido días durísimos para todos y al igual que usted tuve que hacer una catarsis para sobrevivir en medio de una pandemia que, en primer lugar, nos tomó desprevenidos y, en segundo, nos ha llevado a una crisis terrible en lo económico, social y político.  

Señor Periodista, han pasado dos años de lo que se vislumbraba un cambio y hemos sido testigos de la gran catástrofe que ha sido lo que sé denomina la “cuarta transformación”. En misivas anteriores que tuvimos, usted y yo platicábamos sobre la gran expectativa que nos generaba la llegada de Andrés Manuel López Obrador al poder. Creíamos, Señor Periodista, que habría un cambio de 180 grados y los problemas que aquejaban al país, de manera paulatina cambiarían… pero la realidad nos ha dado un frentazo.  

Lo que se ha documentado en los periódicos nacionales es verdaderamente una catástrofe. Andrés Manuel López Obrador se ha convertido en el “dictador”. La crisis de la pandemia por el coronavirus (Covid-19) develó lo que todos sabíamos: el desastre del sistema de salud mexicano y la falta de herramientas y médicos para hacer frente a una enfermedad mortal.  

El coronavirus en México mostró la vileza de la clase política gobernante, el desprecio por la vida humana y sobre todo la politización de los cerca de 100 mil muertos que ha dejado esta infección y el millón de contagios. Señor Periodista, López Obrador ha manejo mal la pandemia.  

Han sido meses de horror, ya no sólo en la salud sino en lo económico que ha derivado en el cierre de empresas y en la pérdida de puestos de trabajo. Millones de personas han visto diluir sus sueños y esperanzas en nueve meses de pandemia. Millones de personas confiaban en Obrador y han visto que no es nada. 

 En cerca de dos años de gobierno, el discurso es el mismo: el pasado neoliberal. Señor Periodista, el presidente vive en el pasado, no tiene miras de futuro. Estamos en la antesala de un sexenio pedido, un sexenio fallido. Señor Periodista, el futuro es incierto y más de encrudece con un gobierno que no tiene rumbo y que la realidad pronto se le estrellará en la cara. Quedo a sus órdenes.